sábado, 23 de agosto de 2008

AJEDREZ

Poema de Marin Sorescu


Yo juego un día blanco,
él juega un dìa negro.
Yo avanzo con un sueño,
él me lleva a la guerra.
Él me ataca los pulmones,
yo pienso un año en el hospital,
hago una combinaciòn brillante
y le gano un dìa negro.
Él juega una desgracia
y me amenaza con el cáncer
(que por ahora anda en forma de cruz),
mas yo le pongo por delante un libro
y lo obligo a una retirada.
Le gano otras cuantas piezas,
pero mira, la mitad de mi vida
está fuera de juego.
- ¡Oh! le daré jaque a tu rey y perderás el optimismo,
me dice él.
- No es nada, bromeo yo.
Pues hago el enroque de los sentimientos.
Detrás de mí la esposa, los hijos,
el sol, la luna y los otros mirones
tiemblan ante cualquier jugada mía.

Yo enciendo un cigarrillo
y sigo la partida.

Traducción de Omar Lara

martes, 19 de agosto de 2008

NO HABLO DEL RÍO

No hablo del agua
no de la cuenca no del lodo
No hablo de la ribera no de los peces
no hablo de las crestas que convoca el viento

No hablo de la transparencia
que desborda
no que inunda
atrapa
infecta
ahoga
olvida

No hablo de las plantas que florecen no sin la lluvia
No hablo de tesoros extraviados por no nativos
ni de monedas no de oro
lanzadas por revolucionarios No

No hablo de armaduras con esqueléticos recuerdos atrapados en metal
No hablo de jaguares en plena cacería
ni de cocodrilos partiendo antílopes por la mitad
como se parte en dos una página
No hablo de cascadas
que es como se llama
a los ríos que se lanzan
por los aires siendo ríos
a los ríos que se lanzan
al abismo sin terror
No hablo de cayucos
ni de anzuelos
no de peces fugitivos
del engaño

No hablo de amarillas alfombras
movedizas
coronando
la corriente
sin su brillo

No hablo de embarcaciones
no del margen que se puede alcanzar con la mirada
ni de iguanas caminando como Jesucristo sobre el agua
No hablo de serpientes

No hablo de la palabra río
no de las letras que conforman la palabra
no hablo de la tilde que cae solitaria
gota de una lluvia apenas iniciada
No hablo de la palabra río
no de las letras que conforman la palabra
El río es otra cosa
que apenas puedo
ere
í
o

UN PASO ADELANTE

Me imagino más viejo
caminando por ciertas calles
con el cabello cano, camino a casa
y la barba de tres días y la mano en el bolsillo
en el juego de llaves, fumando
el último cigarrillo de la noche.

Seré el mismo para entonces
y me pregunto
si alguien me estará esperando
camino a casa.

ESCRIBANO

Alguien dicta al oído lo que escribo, nadie más escucha su palabra de sombra sin voz, sin labios, sin diafragma. Alguien dicta lo que escribo, su voz habla a mis manos, yo no escucho, no es palabra el sustrato; es latido.
Cuando a media noche me despierta el sobresalto de la pluma inaccesible, del inmarcesible papel en blanco ¿quién despierta? ¿quién se queda dormido?
Alguien dicta la tristeza, lo que no soy, lo que nunca he sido.
Alguien dicta, deletrea, suyo el impulso, lo que sin darme cuenta digo, suya la, pausa, el gesto de isla entre tormentas, y cuando no digo,

él es quien calla.

ESCRIBANO

Alguien dicta al oído lo que escribo, nadie más escucha su palabra de sombra sin voz, sin labios, sin diafragma. Alguien dicta lo que escribo, su voz habla a mis manos, yo no escucho, no es palabra el sustrato; es latido.
Cuando a media noche me despierta el sobresalto de la pluma inaccesible, del inmarcesible papel en blanco ¿quién despierta? ¿quién se queda dormido?
Alguien dicta la tristeza, lo que no soy, lo que nunca he sido.
Alguien dicta, deletrea, suyo el impulso, lo que sin darme cuenta digo, suya la, pausa, el gesto de isla entre tormentas, y cuando no digo,

él es quien calla.